Aquí os presentamos hoy a nuestra repostera, que realiza los talleres de repostería en la vivienda con mucha energía, ganas de aprender y un buen puñado de amor.
En una rica tarde de verano, hemos decidido aprovechar esas horas, donde el sol aprieta más de lo necesario, para hacer una receta de magdalenas.
Sabemos que las magdalenas son muy típicas en la repostería española, hay quien las llama pequeños bizcochos dulces ya que se hornean en moldes individuales y tienen una textura suave y esponjosa. En nuestro caso, las aprovechamos para la merienda acompañadas con una horchata fría.
Las magdalenas tienen una historia interesante. Se dice que su origen se remonta a la región de Lorena, en Francia, donde una joven llamada Madeleine las preparaba para los peregrinos que iban a Santiago de Compostela. De ahí, su nombre. Estas delicias cruzaron la frontera y se hicieron muy populares en España, especialmente en el desayuno y la merienda.
Os preguntaréis cuál es la receta que hemos seguido, y como vivir es compartir, aquí os la narramos:
- Primero batimos 4 huevos y 300gr de azúcar.
- Segundo, añadir 160ml de leche (con o sin lactosa) y 120ml de aceite
- Tercero, incorporamos 300gr de harina, un sobre de levadura en polvo y batimos hasta lograr una masa homogénea.
- Por último, en el molde vertemos 3/4 de masa.
- Horneamos 20 minutos aproximadamente con el fuego abajo a 200 grados y nos aseguramos que están hechas al insertar un palillo y que salga limpio.
- Dejamos enfriar sobre una rejilla, ¡Y A DISFRUTAR!
¿Y vosotros, a qué esperáis para probarlas?